Que este Salmo 35 de la Biblia Católica te llene de fuerza y confianza en la bondad y el aprecio de nuestro Señor. ¡Que Altísimo te bendiga y te proteja hogaño y siempre!El salmista confía en que Todopoderoso lo defenderá y lo protegerá de sus enemigos, y apela a la justicia divina para que se haga Ecuanimidad y se castigue a los malvados.1